La recuperación de la obra de Francisco Ibáñez desde que en 2023 falleciera el maestro, ha sido una constante en la editorial que publica su obra desde 2017, gracias a la compra de Ediciones B. Tras París 2024, Lo mejor de 13 Rue del Percebe, Mortadeluxe, y Lo mejor de los comienzos de Ibáñez, este año se ha publicado Los 200 primeros casos de Mortadelo y Filemón. Una recopilación realizada por especialistas en la obra de Ibáñez como Antoni Guiral y Jordi Canyissà. En ella, recopilan las páginas aparecidas en la revista Pulgarcito (más extras y almanaques) desde el comienzo de Mortadelo y Filemón, como agencia de información, desde el número 1394 del 20 de enero de 1958, al 2 de octubre de 1961. Siendo esta la primera vez que se recopilan tantas páginas de Mortadelo en su solo volumen, para deleite de los fans de Francisco Ibáñez Talavera.
En estos primeros casos veremos a Mortadelo (Pi) y Filemón (Pérez) como se desenvuelven como detectives, con sombreros ambos, y pipa el segundo, durante las primeras entregas. Historias en las que el género del "slapstick" (que hace referencia a la exageración de la violencia física, con efectos cómicos), son protagonistas de toda una serie de ocurrencias de nuestros personajes favoritos. En las que se ven envueltos en los casos más disparatados, como la de una actor que interpreta a un carnicero, el robo de unos cerdos cuando se referían a unos cedros, el timo de un perro policía, la aparición del hermano gemelo de Filemón; la llegada de un marciano, un mal entendido con Filemón o el entuerto con un loro hablador. Tan solo unos ejemplos de esta magna obra, con la que Ibáñez estuvo hasta 1969, cuando llegaron las historias largas.
El álbum viene con un breve recorrido sobre la vida de Ibáñez, de su padre Firmo, que era contable y procedía de Alicante, y de su madre Herminia Talavera, que llegó con su familia desde Málaga en barco a Barcelona, y que había trabajado como costurera. Ibáñez tenía dos hermanos, uno mayor, Firmo, y hermana menor Ana María (la cual ha aportado información al libro). Sus primeros trabajos profesionales antes de llegar a Bruguera (mientras trabajaba como botones del Banco Español de Crédito), de su amistad con Raf (Juan Rafart), o de cómo conoció a su mujer, Remedios, en una tienda de caza (mientras realizaba una sección de deporte); llevado por un amigo que era propietario de dicha tienda.
Esta introducción que hacen Antoni Guiral y Jordi Canyissà de la vida y obra de Francisco Ibáñez, es realmente excepcional, con un número de datos muy importante. Así como un texto intermedio, en el que se analiza el estilo de dibujo sintético del autor, el dinamismo de sus personajes, y su trazo firme. Al final del tomo, también hay un texto biográfico sobre Ibáñez.
La edición del libro está cuidada al máximo, con un diseño de cubierta y contra espectacular, con una selección del dibujo de la cubierta muy acertado (extraída de una cabecera la sección “Concurso detective” de la Tío Vivo de Bruguera), con el título con el se ha bautizado el libro. En referencia a las páginas reproducidas, tengo que decir que es un tanto irregular, las hay que se ven muy bien, mientras que otras no se reproducen con la calidad que se debería. También hay que entender que al ser reproducidas de las revistas originales, estás tampoco estaban impresas a veces en la mejores condiciones.
Los 200 primeros casos de Mortadelo y Filemón son sin duda el primer paso para la recuperación de todas las historias de Mortadelo y Filemón en la revista Pulgarcito. Crucemos los dedos para que el rey de los disfraces merezca la mejor de las suertes, y próximamente veamos recopilados los siguientes casos, de una de las mejores historietas españolas de todos los tiempos.
Los 200 primeros casos de Mortadelo y Filemón (1958-1961)
Guion y dibujos de Francisco Ibáñez
Prólogo y textos de Antoni Guiral y Jordi Canyissà
Cartoné, 240 páginas, 21,7 x 30,1 cm, color y b/n
PVP: 29,95€